domingo, enero 08, 2006

¡El, no toma... ...consejos!

Despierta tumbado boca a bajo, la cabeza le retumba de gritos, los ojos los tiene inyectados en sangre, las manos hinchadas por corrientes caudalosas, su lengua desértica le implora por agua, su aliento de fuego podía quemar al mas mínimo contacto cualquier superficie seca, apenas podía mover su cuerpo, dolores y malestares estomacales le provocaban nauseas, todo le daba vueltas.

El mas pequeño pensamiento le hacia saltar la cabeza, el trata recordar como había llegado ha ese estado, pero solo cortos pasajes de la juerga se le venían a la mente, recuerda a Ricardo en su auto pasándolo a buscar, la llegada a la casa de Fernando, la música, el bailoteo, las amigas de la polola del Jaime que estaban para comérselas, recuerda haber atinado con la Mili, los juegos etílicos, donde el que perdía se tomaba al seco una bomba preparada por Guillermo, pero de ahí no pasa, se le borra la imagen, la señal se ha perdido.

De pronto siente una mano en su espalda.“¿estás bien?, ¿cómo te sientes?”, le hablaba una voz irreconocible.

El trata de moverse para ver quien es, pero esta totalmente adolorido.

“¡No!, no te muevas, puede ser peligroso”, le replica la misma voz, pero el no entiende nada, “quédate tranquilo que todo va a salir bien, ¿Cuál es tu nombre?”.

Tratando de incorporarse le dice “Javier me llamo”.

vuelve a sentir la mano en la espalda, “Ok Javier, te repito no vuelvas a moverte, todo va ha estar bien, tu herida no es de consideración, ya viene la ambulancia, ¿cómo se llamaba tu amigo?”.

Entonces a Javier le recorre por el cuerpo una gran electricidad, “¡¿cómo, Cual amigo?!”.

El de la mano le contesta “La persona que iba contigo”.

“¡Tiene que ser Ricardo!”, dice Javier con voz temblorosa, como dándose cuenta de la situación.

“Javier, siento mucho decirte esto, pero por tu amigo no pudimos hacer nada, ahora los de Rescate están trabajando para sacar su cuerpo del vehículo”, le palmotea la espalda como para darle aliento, “ quédate allí ya un paramédico va a venir a verte”.

Javier tendido en el pasto, se toma la cabeza, se da cuenta que tiene un chichón en su frente, tiene un poco de sangre, entonces una gran pena le invade el alma, brotan de sus ojos miles de lagrimas, y en un haz mental, se le viene la cara de la hermana de Ricardo, pidiéndoles que se quedaran en la casa del Fernando, para dormir la mona, que en ese estado no podían irse manejando, pero Ricardo ya tantas veces en estados anteriores habiendo manejado su vehículo sin ninguna calamidad, hizo caso omiso a los consejos de su hermana.

3 comentarios:

Vico dijo...

Juan Pablo, este es uno de tus post que me ha gustado mas.
Me encanto como lo escribistes!
Parece ser que la practica te va mejorando en la redaccion.
Pero ademas, tiene mucho contenido.
Y lo terminaste genial!
Realmente te felicito me ha EN CANT A DO.
AH por si no te dije...feliz 2006!

Julianne Moore dijo...

como le va?...
muy re' gueno su post...da pa' pensar..ah?...
yo siempre digo es mejor andar a paturri si el jugo es demasiao'..

siyuleiter!

EP dijo...

es una serial!!!

ya me lo imagino...te apuesto que en un tiempo mas me voy a acordar y voy a decir: lo vi, lo lei o me lo contaron??

ahahha

saludos!
nu